Marioneta
Teatro de cuerpos. Suficiente un beso en la mejilla y ese perfume a pájaros de fuego y flores de papel hasta el fondo de los pulmones. Marioneta soy del nacimiento de tu cuello, porque quiero jurar que huele a victoria. Pienso quedarme cerca, al acecho, revoloteando a ver si pierdes conmigo alguna mirada para cogerla al vuelo aparentando descuido.
Sí, sería suficiente tus ojos en los míos para que yo olvidara.
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
ResponderEliminarComo pintado en azul de Prusia... intenso, verídico, con el poder del deseo en cada letra...
ResponderEliminarSomos marionetas del espacio y el tiempo, artífices de nuestras vidas y navegantes de caminos nuevos y desconocidos.
ResponderEliminarComo pintado en azul de Prusia... y no sé si evoco castillos con tejados azules, o quizá un cielo reflejado en los ojos de g.
ResponderEliminarMe encanta lo de ser artífices; relojeros absortos en el mecanismo del reloj... aunque sea de los que midan el tiempo.
ResponderEliminar